Comuneros encolerizados enfrentan al Consejo de Nahuatzen; lo culpan del asesinato de David Otlica

Nahuatzen, Michoacán. La muerte del alcalde David Otlica, presidente de Nahuatzen, tuvo desde varias horas en la calle a cientos de comuneros con palos, piedras, bombas molotov y cohetes con los que enfrentaron al Consejo Indígena con la intención de expulsarlo de manera definitiva del municipio.

Integrantes del Consejo permanecieron atrincherados en la casa comunal, a una cuadra del centro de la cabecera municipal. Alrededor de 800 cuerpos  de la Policía Michoacán llegaron cerca de las 16:00 horas para intentar serenar a la encolerizada población del municipio, que responsabiliza al Consejo del asesinato del alcalde.

El subsecretario de Seguridad Carlos Gómez Arrieta llegó a la población junto a la Policía Michoacán y declaró a esta casa editorial que de principio sólo se buscará mantener el diálogo entre los comuneros y el Consejo. Declaró además que desplegaran un total de 800 elementos.

Afuera de la casa comunal quedan los restos del enfrentamiento entre ambos grupos. En las calles se pueden observar autos volteados, restos de cuetones, botellas y vidrios rotos, así como restos metálicos que impiden que se acerquen los inconformes.

La tensión sigue latente. El conflicto comenzó desde las primeras horas del día al interior de la cabecera, en ese momento únicamente había una patrulla de la Policía Michoacán, quienes se han limitado a hacer acto de presencia.

Sin embargo, horas más tarde a través de redes sociales, el gobierno de Michoacán aseguró que desplegó “250 elementos de la Policía Michoacán al municipio de Nahuatzen para resguardar el orden, la paz y la tranquilidad de los pobladores de la región. No daremos un paso atrás en garantizar la seguridad”.