La Cámara de Diputados aprobó ayer el dictamen para combatir a las empresas “fantasma” y la defraudación fiscal con facturas falsas. El documento se envió al Ejecutivo federal para sus efectos constitucionales.
Con la mayoría de Morena y sus aliados, el dictamen considera los actos ilícitos contra el fisco federal como amenaza a la seguridad nacional, los cuales ameritan prisión preventiva oficiosa y se incluyen en el catálogo de delitos cometidos por la delincuencia organizada, tema en el que la oposición, sobre todo PAN, PRI y PRD, no estuvo de acuerdo.
Entre esos ilícitos están el contrabando, la defraudación fiscal y la expedición, venta, enajenación, compra o adquisición de comprobantes fiscales que amparen operaciones inexistentes, falsas o actos jurídicos simulados.
Los cambios adicionan y derogan diversas disposiciones de las leyes federales contra la delincuencia organizada y de seguridad nacional, así como de los códigos Nacional de Procedimientos Penales, Fiscal de la Federación y Penal.